Organic Sculptures
Las dos esculturas presentan formas orgánicas que evocan la fluidez de la naturaleza. La primera escultura, con un perfil sinuoso, recuerda a una hoja que se despliega. Su superficie, de barro refractario negro, tiene un acabado mate que absorbe la luz, creando un juego de sombras que destaca sus contornos suaves.
La segunda escultura se asemeja a una figura abstracta que sugiere el movimiento de una ola. Sus curvas y hendiduras parecen fluir en un diálogo constante entre el vacío y la materialidad. Ambas piezas, a pesar de sus diferencias, comparten una esencia que invita a la contemplación, fusionando arte y naturaleza en una expresión visual armoniosa.
Las dos esculturas presentan formas orgánicas que evocan la fluidez de la naturaleza. La primera escultura, con un perfil sinuoso, recuerda a una hoja que se despliega. Su superficie, de barro refractario negro, tiene un acabado mate que absorbe la luz, creando un juego de sombras que destaca sus contornos suaves.
La segunda escultura se asemeja a una figura abstracta que sugiere el movimiento de una ola. Sus curvas y hendiduras parecen fluir en un diálogo constante entre el vacío y la materialidad. Ambas piezas, a pesar de sus diferencias, comparten una esencia que invita a la contemplación, fusionando arte y naturaleza en una expresión visual armoniosa.
Las dos esculturas presentan formas orgánicas que evocan la fluidez de la naturaleza. La primera escultura, con un perfil sinuoso, recuerda a una hoja que se despliega. Su superficie, de barro refractario negro, tiene un acabado mate que absorbe la luz, creando un juego de sombras que destaca sus contornos suaves.
La segunda escultura se asemeja a una figura abstracta que sugiere el movimiento de una ola. Sus curvas y hendiduras parecen fluir en un diálogo constante entre el vacío y la materialidad. Ambas piezas, a pesar de sus diferencias, comparten una esencia que invita a la contemplación, fusionando arte y naturaleza en una expresión visual armoniosa.